Os presentamos a Fundación Intras, candidata a ser la beneficiaria de El Buen Café, una entidad sin ánimo de lucro cuyos objetivo es la recuperación de derechos de las personas con enfermedad mental.
Conversamos con Teresa Orihuela, Directora Técnica de Fundación Intrás, y lo primero, como es natural, es que se presente:
Me llamo Teresa Orihuela llevo trabajando casi 25 años en la Fundación, fui la primera trabajadora… ¡¡¡durante algun tiempo la única!!! Hoy ya somos casi 300 personas. Soy Licenciada en Geografía e Historía y Psicóloga Clínica, mi trabajo está centrado en la dirección técnica de la entidad y procuro tener algún tiempo para ejercer como clínica. Cuando al principio formé parte del origen de la fundación quería que las personas con enfermedad mental fueran reconocidas como colectivo para que pudieran recuperar sus derechos, 25 años después creo que esa recuperación de los derechos a veces es la “cura milagrosa” y que ese reconocimiento o identificación como colectivo a veces no es tan importante porque los estigmatiza.
¿Qué es Fundación INTRAS y cual es vuestro objetivo principal?
Somos una entidad sin ánimo de lucro creada en 1994 que, con un equipo de cerca de 270 profesionales, acompañamos a personas con problemas de salud mental en la recuperación de sus proyectos de vida.
Ofrecemos servicios profesionales para atender las necesidades de las personas: alojamiento, formación, empleo, asistencia personal, ocio y tiempo libre, apoyo mutuo, investigación, psicología y rehabilitación psicosocial….
Contamos con 24 centros distribuidos en 6 provincias de Castilla y León (Valladolid, Zamora, Salamanca, Burgos, Palencia y Ávila) y Madrid, además de trabajar en red con entidades de toda Europa a través del desarrollo de proyectos.
¿Cuántos socios, voluntarios y usuarios tenéis?
Entre todos los recursos que os mencionábamos en la pregunta anterior, son cerca de 800 los usuarios que atendemos cada año.
Al ser una Fundación no contamos con socios, pero tenemos la figura de Amigos de la Fundación, que son personas que dan apoyo al trabajo que realizamos. Respecto al voluntariado, se trata sobre todo de voluntarios europeos, jóvenes que al finalizar sus estudios pasan unos meses en España colaborando con entidades del tercer sector.
¿Qué proyectos desarrolláis o habéis desarrollado en Valladolid? ¿Cuál es vuestro favorito?
Bufffff, hay muchos y es difícil quedarnos solo con uno. Tenemos proyectos formativos que permiten a jóvenes con problemas de salud mental formarse de cara a un futuro empleo, proyectos de formación para el empleo orientados a la hostelería (Zetallons Catering), la agricultura (reparto de cestas ecológicas), los servicios de limpieza u oficina…
Estamos apostando fuerte por la implantación de la figura del asistente personal dentro de nuestros servicios, que también implica formar a los futuros profesionales.
En el centro de día ‘Veinte Metros’ estamos trabajando con intensidad a través de la arteterapia consiguiendo resultados muy interesantes.
Acabamos de ganar una beca de la Diputación que nos permitirá realizar un estudio de la situación de la mujer con discapacidad en el ámbito rural de la provincia de Valladolid.
Proyectos culturales como el Premio Internacional de Fotografía y Locura ‘Locografías’ que ya lleva 3 ediciones, la campaña Locuras/Corduras a la que se han sumado casi 1000 personas… O de deporte a través del Club Deportivo Duero que nos permite realizar de manera muy efectiva trabajo en la comunidad.
Sin olvidar el trabajo con los mayores que sufren deterioro cognitivo a través de la Clínica de Mayores.
¿Dónde irían destinados los recursos de El Buen Café? Además del tema económico, ¿qué “beneficios” puede traer a una organización como la vuestra participar en esta iniciativa?
Este año estamos poniendo en marcha un nuevo proyecto, financiado por el Ayuntamiento de Valladolid, dirigido a personas sin hogar con enfermedad mental. El objetivo principal es ofrecer oportunidades de recuperación y/o reducción de daños a las personas que viven en la calle y sufren malestar psíquico.
Con la iniciativa que hemos presentado para el El Buen Café: ‘Poso a poso. Cafés a cielo abierto’ queremos completar este proyecto poniendo a disposición de las personas una taza de café como herramienta de generación de vínculos.
Por un lado, compartiremos el café en plena calle, utilizándolo como herramienta de acercamiento, por otro, crearemos espacios seguros en los que se respetará en todo momento los gustos de la persona, sus horarios, su autonomía y sus decisiones. Gracias a estos espacios conseguiremos establecer un vínculo de confianza.
Las personas sin hogar se vuelven, en muchas ocasiones, invisibles. Con esta iniciativa, además de poder comprar los suministros de café y alimentos durante todo el año 2019, conseguiremos visibilizar un problema social que permanece oculto: el sinhogarismo como reflejo de la exclusión social más extrema.
¿Qué crees que es lo mejor y lo peor de tu trabajo?
Lo mejor sin lugar a dudas es tener la suerte de conocer y establecer lazos de amistad con personas con malestar psíquico, acercarse a la locura desde la mirada profesional permite conocerse mejor a uno mismo, otra cosa que me hace venir a trabajar contenta e ilusionada es trabajar en equipo con profesionales brillantes, generosas y muy divertidas que hacen de una idea una realidad para ser aplicada en forma de proyecto o intervención.
Lo peor es todo aquello que enlentece y entorpece el trabajo de verdad y que tiene que ver con burocracia, trabas y controles innecesarios.
Si alguna persona quiere colaborar con vosotros como voluntario o apoyándoos de otra manera ¿cómo puede hacerlo?
Pueden contactar con nosotros a través de varios canales. En nuestra web tenemos un apartado específico de voluntariado.
En el caso concreto de la iniciativa ‘Poso a poso. Cafés a cielo abierto’ estamos diseñando una campaña de voluntariado en la ciudad de Valladolid denominada ‘Vivir con los cinco sentidos’. En ella utilizaremos el sentido del sabor para implicar a la comunidad en las sesiones de reparto del café. También utilizaremos la vista para conocer otras realidades. Además, utilizaremos el sentido del oído para escuchar las necesidades y demandas de cada persona. Utilizaremos el olfato para intuir las dificultades a las que se enfrentan las personas en diferentes situaciones. Y, utilizaremos el tacto para ser cuidadosos y proporcionar la intensidad de compañía y apoyo requerido en cada circunstancia.
Cualquier persona interesada puede ponerse en contacto con nosotros llamando al teléfono 983 399 633, estaremos encantados de informarle sobre el proyecto. Nos adaptaremos a su disponibilidad e intereses para conseguir que la participación e implicación de los voluntarios con el proyecto sea lo más enriquecedora posible.
¿Y si fuese un posible usuario o familiar? ¿Cómo contactar con vosotros y que puede esperar?
En Fundación INTRAS acompañamos a las personas para que puedan dirigir su vida, elegir dónde, cómo y con quién quieren estar. Para ello, utilizamos como herramienta el Proyecto de Vida. En ella se identifican las metas, las estrategias y las acciones a tener en cuenta para llevar a cabo aquello que la persona desea hacer en su vida.
El fin último del proyecto de vida es dar poder a la persona, dar prioridad a sus deseos, valores y expectativas, a la vez que proveer de apoyos individuales necesarios para ponerlo en práctica.
De este modo acompañamos la recuperación de las personas con enfermedad mental a través del ámbito laboral, del ámbito formativo, del ocio y del apoyo individualizado en el lugar en el que residan.
Pueden contactar a través del teléfono (983 399 633), correo electrónico o visitando cualquiera de nuestras sedes. En la web la de Fundación tienen información de todas las líneas de trabajo que desarrollamos, así como de las localidades en las que trabajamos.
¿Te gustaría añadir algo más?
Respecto al proyecto, incidir que nos apoyaremos en el café como elemento para vincular a las personas y para crear comunidad. De todos modos, el café no solo será determinante en la fase inicial del proyecto sino que apoyará la intervención con las personas sin hogar durante todas sus etapas:
1. Detección de casos y acercamiento: utilizaremos el café como pretexto para el primer contacto.
2. Acompañamiento: gracias a compartir cafés crearemos el vínculo entre profesional y usuario.
3. Autonomía personal: observando cómo la persona prepara un café detectaremos sus habilidades básicas. Además, crear hábitos y rutinas permitirá a los usuarios desarrollar nuevas destrezas.
4. Coordinación con servicios y recursos: el enlace establecido con nosotros facilitará que la persona tome café con otras entidades o administraciones.
5. Sensibilización y difusión: este proyecto, junto con Le Bistró, nos permitirá llegar a la sociedad, visibilizar un problema y generar conciencia social.
Y respecto a ‘El buen café’, que es una iniciativa que nos encanta, nos sentimos realmente agradecidos por haber sido seleccionados como finalistas por segunda vez. Solo estar entre los finalistas ya nos permite conocer a otras entidades de la ciudad con las que ya hemos encontrado puntos en común que seguro que muy pronto dan lugar a colaboraciones.
Hace algunos años era impensable que un restaurante y sus profesionales destinaran recursos para promover una campaña de acción social, y dieran muestras como hacen los profesionales de Le Bistro de esa gran sensibilidad social, que sea un café o un restaurante el promotor de una iniciativa como “El buen café” me hace pensar que algunas cosas están cambiando en nuestra sociedad y que hay motivos para el optimismo.